Crash

Gritar, ser la excepción que confirma la regla, volver a gritar y romper todas las normas impuestas. Vivir. Saborear la eternidad, tener la inmortalidad al alcance de tu mano. Sentirte realmente joven y conocer por primera vez el significado de tal concepto.
Nunca me leí el prospecto que acompañaba a la vida y creo que por eso en parte nunca sabré como vivir. Pero estaba allí, sentada, sintiendo que la palabra libertad es demasiado corta para algo tan inmensamente enorme. Y reía, solo reía.
Por un puñado de segundos, solo es eso. Porque queramos o no siempre viviremos por y para ello. Para poder sentir de nuevo esos segundos en los que el mundo se reduce hasta coger en la palma de tu mano y los sueños son algo que está más que al alcance de tu mano. Por esos momentos en los que la eternidad se concentra en tan solo unos segundos y conocemos verdaderamente el significado de la palabra plenitud.