- Juguemos a que yo finjo que eres único para mi y tú finges que soy única para ti.
- ¿Y que ocurre si acaba convirtiéndose en realidad?
- Tendremos que extirparnos el corazón.

García Márquez tenía mucha razón al afirmar que alguien no te quiera como tu deseas no significa que no lo haga con todo su ser. Idealizamos el amor como si de una película se tratase nuestra vida, intentamos llevar a cabo algo práctico; que quede bonito para contar. Pero lo cierto es que las mejores historias de amor no tienen por qué estar embellecidas de detalles extremadamente románticos.
No barajé la posibilidad de que esa fuera tu forma de quererme, me gustaba echar en falta todo aquello que no teníamos porque en el fondo eso nos permitía continuar. Y hoy vuelvo junto a ti, sin reproche alguno por tu parte, y yo no puedo dejar de sentirme mal por despreciar un amor común, ordinario, pero tal vez real.

Acércate lentamente que pueda observarte en la oscuridad de la noche. Tu sonrisa me cuenta que la vida no te ha tratado bien, tus ojos me dicen que esta noche alguien tampoco lo hará. No tengas miedo de descubrirte al mundo tal y como eres, la noche hará suyos tus miedos permitiéndote despertar cada mañana. Aprende a sosegar cada latido de tu desbocado corazón, el sonido de tu respiración equivaldrá al de tus pasos en medio de esta habitación sombría. Susúrrame de nuevo aquello que te atormenta y cuando acabes, suspira, y vuélvete a perder el medio de la oscuridad de la nada.

La amistad siempre llevará impresa una pizca de amor. Y el amor siempre nos volverá un poco más crueles.
Tal vez creas que puedes controlar la situación, pero hay ocasiones en las cuales la fina línea que separa ambos términos, amor y amistad, desaparece creando algo inexplicable a ojos de quien no ve más allá de los conceptos creados por la razón. Siempre nos será más difícil controlar aquellos sentimientos nacidos de la nada.
El amor es uno de los sentimiento más egoístas que conoceré. El deseo de mantener a una persona a tu lado por el simple hecho de poder disfrutar de ella nos llevará a amarnos tan solo a nosotros mismos. La famosa frase de García Márquez "no te quiero por lo que eres, sino por lo que soy cuando estoy contigo" se vuelve cada vez más real.
Hay una alta posibilidad de que solo quisiera tenerte de algún modo para siempre a mi lado, es muy probable que solo me estuviera asegurando de hacer de nuestra amistad algo duradero.

"La acción da carácter, nos dicen en clase. Significa que si no hiciéramos nunca nada no seríamos nadie. Antes de conocerte yo no había hecho nada y a veces pienso que nadie hace nunca nada en este estúpido país.""

An education

"¿De qué me sirve tenerlo todo si no hay con quién compartirlo?"

Querida yo dentro de muchos años.Decidí escribirte esta entrada con el fin de advertirte de ciertas cosas que como bien sabemos deberías de llevar a cabo. Tal vez te sorprendas de leer esto.

Querida yo, supongo que después de tanto tiempo habrás aprendido muchas cosas (o al menos eso creo). Ojalá hayas cumplido gran partes de tus sueños e intentado la mayoría de tus metas. No le hagas caso a la cabeza cuando el corazón grita, porque el siempre te hará elegir lo realmente deseado. Sueña, a gran escala. Déjate influenciar por otros, nunca sabes que aprenderás de quienes te rodean. Llora siempre que lo necesites y ríe aunque no quieras, tú y yo sabemos que no siempre dejas que el resto vea como te sientes realmente.Aprende más sobre arte, nunca es suficiente, y no dejes de escuchar todo tipo de música. Espero que hayas encontrado a alguien que te quiera tal y como eres, o al menos que te quiera. Pero sobre todo que te deje quererle con todo tu ser. Es de suponer que habrás perdonado todo aquello que te haya herido, porque tú siempre lo acabas haciendo (gran error por nuestra parte).
Pero sobre todo, quiero que hayas sentido que has vivido cada día que ha pasado; aprendido el secreto de las pequeñas cosas y los momentos más efímeros. Sonreír con cada rayo de Sol, observar la lluvia caer a través del cristal, besar a alguien una y otra vez sin cansarte, sorprenderte otra vez al volver a aquel lugar. Una vez alguien nos dijo que el secreto de nuestra felicidad consistía en valorar las pequeñas cosas que nos rodean: deseo que siga siendo así, porque vivir es algo increíblemente maravilloso.
P.D: Ya me contarás qué tal Roma, Londres, París, Berlín, Buenos Aires, Praga, Cuba, Egipto...

Nunca te arrepientas de haber amado.

Hay veces que es necesario perder aquello que tenemos para darnos cuenta de cuanto lo necesitamos.
Echarás la vista atrás cuando ya sea tarde, justo en el momento en que ya su sombra ni tan siquiera se divise a lo lejos. Cuántas noches a la luz de las estrellas pasaras deseando girar las manillas del reloj hacia un pasado que aún no terminó de convertirse en polvo. Puede que tus lágrimas nunca encuentren la puerta de salida en un corazón hermético.
Saber qué queremos nunca fue fácil. Determinar por qué lo hacemos se convirtió en algo realmente complejo.
El olor de su fragancia un tus manos. Los besos en la comisura de los labios. El sonido de su risa rompiendo el silencio.

Y ahora dime que no sientes nada...

Los gritos se entrelazaron con un silencio sepulcral que solo sirvió para lapidar cualquier retazo de sentimiento. Campanadas de agonía por cada uno de los te quieros vacíos que pronunciaste ante ella. Jurarás solemnemente no hacerlo jamás, tratarla como se merece. Querrá creer que es verdad una vez más, completamente.
El corazón siempre será ciego e iluso. Dime ahora tú que no sufrirás nunca por nadie. Prométeme que no caerás de nuevo, una vez más, en las garras del desamor.

Ojalá algún día consigas ser el motivo para quedarse de alguien...

Aún sigo corriendo hacia ti para buscar cobijo después de otro azote más de este frío y cruel mundo que solo saber darnos dolor de cabeza. Sentir que solo tú me comprendes siempre ha sido algo difícil de comprender pero fácil de aceptar ya que como buen espíritu naufrago solo me dirigía desesperada hacia el calor de un amor desconocido para mi hasta el momento.
La distancia no es el olvido pero si el dolor. A veces me siento un poco huérfana de ti. Porque nunca nadie me dio tanto sin pedir nada a cambio...

... tal vez poco de amor.

No admitir el problema comienza a ser el principio del mismo. Aceptar tarde la errónea elección que cambió tu vida tan solo dolerá segundos en comparación con lo perdido. Echas la vista atrás preguntándote por qué alguien escogería de nuevo tu camino. Ingenuidad, confusión o incluso ceguera.
La herida sanará pero la cicatriz siempre recordará que algún día estuviste aquí. Tan perdida que la única salida posible fue comenzar, otra vez más.

Dejar la autodestrucción como método de desarrollo no resulta tan fácil como parecía. Quererte a ti misma, y lo que resulta más difícil, querer creer que otra persona lo hace nunca fue algo que comenzará a florecer de un día para otro.
Observo ese vaso vacío mientras rodeo el borde con los dedos. Parece mentira cuántas cosas pudieron salir de una simple copa, resulta increíble intentar ser capaz de vivir con el corazón como único estímulo ante la vida.

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Lo cotidiano se convierte en extraordinario en cuanto apareces. Sonríes y creo creer saber donde estoy, pero lo cierto es que ni tan siquiera logro situarme en este mundo. Me rozas, el mundo se detiene por tan solo unos segundos para reanudarse a pasos agigantados. Reapareces con cada nota de toda canción y justo cuando creo haber conseguido poner nombre a esto que me late dentro, todos los esquemas se rompen.
Y solo queda volver a empezar...

Vendería mi alma al diablo por tan solo un abrazo. Aprendí a no esperar nada de nadie, a no necesitar a alguien, a poder huir cuando nada sale bien. A guardar un plan B.
Sonreír no es signo de felicidad, llorar no muestra debilidad. Mendigar un poco de tu amor se convierte a medida que pasa el tiempo en un acto más necesario.

Me encanta observarte sin que te des cuenta para así poder dibujarte cada noche en mi cabeza justo antes de dormir. Hacer de la comisura de tus labios una sonrisa de convierte cada día en la más importante de mis tareas. Escucharte cada despertar sería un regalo que ni mil cantos de ruiseñores podrían equiparar.

Vivir, soñar, sentir. ¿Qué más se puede esperar? Tan solo que algún día consigas descifrar palabras de amor detrás de cada uno de los movimientos que componen la complejidad de mis ser, dejándome seguir mostrándote aquello que soy con toda claridad.
Permitiéndose seguir siendo yo, solo contigo.

Me pregunto qué recordarás de nosotros cuando mi ausencia inunde las cicatrices causadas por los vestigios del tiempo. Cómo serán tus atardeceres sin mi voz de fondo susurrándote sonetos anónimos de poetas muertos que algún día vivieron tan solo a base de amor. Cuándo aceptarás la remota posibilidad de echarme de menos por tan solo unos segundos. Y quién descolocará tu vida cada día con fantasías imposibles de realizar.

Preguntarme qué harás sin mi sería afirmar la existencia de interés por tu parte hacia mi persona. Responderme asumiendo la posibilidad de que no me recuerdes tan solo llevaría a creer que todo ha sido una mentira. Y no quiero vivir otra mentira.

El otro día realizamos un ejercicio de clase que consistía en escribir todas las letras de tu nombre en un papel y posteriormente unir cada una de las letras con un adjetivo que consiguiera describirte. Lo cierto es que entre las pocas cosas que se me ocurrían no creía que fuera nada de ellas. La mayoría de cosas estaban más relacionado con lo que anhelaba ser que con como yo sentía que realmente soy. Y eso me llevó a pensar ¿Cómo soy realmente? ¿Coincide lo que pienso de mi con lo que piensan los demás?

Como si de un camino de baldosas se tratara nos vamos formando. Tal vez algunas no encajen muy bien entre sí, porque no todo aquello que nos compone logra tener mucha conexión. Porque las incoherencias dan lugar a la coherencia vital. Y habrá trozos de calzada que contengan recovecos, trozos rotos de suelo porque ningún corazón logra escapar de la guerra que es la vida. Algunas baldosas destacarán por encima de otras debido a que en ocasiones realizamos el intento fallido de mentirnos sobre las razones que nos guían. Pero como todo buen camino siempre llevará a una dirección sin que el sentido importe, tan solo el destino.
Puede que no sea nada de lo que creo ser o incluso todo. Cabe la posibilidad de que la respuesta sea que soy todo aquello que creo, unido a lo que ahnelo y mezclado con todas las cosas que nunca conseguiré ser.

Cambio cada una de tus manías por todos mis desengaños, pido una tregua entre nuestros labios.

Podríamos pasar horas discutiendo sobre quién utiliza a quién en esta relación. Si eres mi tabla de salvación o soy el impulso que te lleva a remar hacia la orilla en tiempos de tormenta.
Me pregunto ¿qué más da? ¿Por qué hay que determinar? Eres mi instante de fugacidad, logras deshinibirme de la monotonía de este mundo sacrificador de sueños. Consigues hacerme reír.

Aspiro la calada mientras observo tu desnudez en medio de la oscuridad mientras me pregunto cómo un instante puede ser tan inmensamente pleno y a la vez pasajero. Te duele saber que nunca conseguirás acabar con esa distancia que nos separa, me duele reconocer la fecha de caducidad de este sentimiento.
Recorro cada uno de los rincones de tu espalda mientras te susurro que me encantaría que contaras cada uno de mis lunares en esta madrugada. Me miras fijamente y me siento eterna. Porque que no te necesite no significa que no te quiera. Que te extrañe no significa que me hayas conseguido conquistar.